Abril ha sido un mes de ensueño para el municipio de Veracruz, si se toma en cuenta la noticia de que en su territorio se instalará una cervecera de la empresa Constellation Brands, en sustitución de aquella planta industrial cancelada hace dos años en Mexicali, Baja California, a causa de conflictos socioambientales en torno al suministro del agua que requería dicho macroproyecto.
En una superficie de 300 hectáreas de la localidad de Vargas, se construirá en el municipio porteño una obra en la que se invertirán mil trescientos millones de dólares. Sin duda, esta es una información que anuncia muchas cosas buenas para la población, algunas incluso ya calificadas como mágicas.
Lo primero que se observó este mes fue la presencia del presidente de la república y del gobernador en el puerto de Veracruz, otorgando a su alcaldesa y al alcalde de Boca del Río un trato diferente y, además, autorizándoles programas y acciones como nunca antes, que mueven a pensar que la 4T les incluyó en estrategias y escenarios de relación positiva, cordial y con miras al futuro. Lo que resulta difícil, ya que, en política, regularmente, lo que ves, no es.
Tal vez la decisión de la empresa para establecerse en la zona, requirió que las autoridades de los tres órdenes de gobierno tuvieran que manifestar armonía y mostrar una estrecha coordinación política, situación imposible en años previos. Esta vez, tanto López Obrador como Cuitláhuac García, tuvieron extremo cuidado en hacer sentir el mimo, el respeto y la consideración hacia Patricia Lobeira y Juan Manuel Unanue, los dos principales alcaldes de la zona conurbada.
La magia del mes de abril se hizo patente también en las palabras de la presidenta municipal de Veracruz, quien, con una gran carga de ingenuidad, complacencia o se fue de ‘Boca’, hizo un anuncio difícil de cumplir en estas épocas: “por cada litro que utilice la empresa cervecera, devolverá a la sociedad dos litros de agua limpia”. Evidentemente, una expresión de buena fe de una dama que no imagina el tamaño de la dificultad para hacer efectivo semejante compromiso por una empresa trasnacional.
Pero la principal señal de magia, es la confirmación o manifestación plena de que Patricia Lobeira puede tener una actitud ecuánime y que la dama está destinada a tareas de mayor responsabilidad, pudiendo contar para ello hasta con la simpatía del jefe de la república.
La gran duda en este asunto se encuentra en saber cómo harán las autoridades para suministrar un total entre 20 y 30 millones de metros cúbicos de agua al año, para la elaboración de la cerveza. Para ese fin puede haber tres opciones que pudieran generar problema: obtenerla de pozos profundos, o de la red municipal o, en caso extremo, trasladarla desde el Río La Antigua (a sólo 10 kilómetros de distancia, pero con tratamiento de alto nivel y previo desazolve del río). Y de acuerdo con lo que ya indicó la señora Lobeira de Yunes, falta saber cómo harán esos empresarios para conseguir dos partes más de líquido que requiere el proceso industrial, para devolvérselo a la sociedad, como ella adelantó.
Es muy probable que la localidad de Vargas hubiera sido elegida por las opciones de agua profunda, y también por la vía del ferrocarril que cruza por allí y por su cercanía con el puerto marítimo y con el aeropuerto. Pero, además, porque estando muy cerca de la zona urbana, puede contar con garantías de seguridad pública, aspecto difícil de observar en otras regiones.
La presidenta municipal, que ya contabilizó miles de empleos directos e indirectos en las fases de construcción y operación, debiera aprovechar la oportunidad para conseguir de la empresa las condiciones seguras y permanentes sobre contratación de personal de su municipio, tanto obrero como profesional, y también, programas de capacitación, obras de desarrollo urbano complementarias, y sobre todo, identificar debidamente las obras de remediación ambiental que se necesiten o imponga la autorización de la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) que deberán otorgar las autoridades correspondientes, antes de iniciar los trabajos de campo.
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En Veracruz, Constellation Brands deberá hacer honor a lo que ha impulsado en otras latitudes: que su actuar está regido con los más altos estándares morales y éticos, haciendo valer a plenitud su eslogan preferido: “Siempre hacemos lo correcto, incluso cuando es lo más difícil”. Y si hace gala de su lema, está claro que con los de la 4T no habrá afinidad, pero si utilizará a lideres empresariales -ansiosos de reflectores y negocios- para promover su industria.
Por lo pronto, Patricia Lobeira continúa construyendo escenarios por lo que pudiera ofrecerse, incluyendo magia a su favor, rumbo a una senaduría o gubernatura. Porque en este instante nadie podrá negar que ella es una de las tres mujeres mejor posicionadas en lo político en esta entidad federativa.
¿Patricia Lobeira de Yunes logrará conseguir una Victoria y una Corona?
