En dos años se perdieron en el estado 35,161 empleos formales entre febrero de 2020 y junio de 2022, informó el Observatorio de Finanzas Públicas y Desarrollo Regional de la Facultad de Economía de la Universidad Veracruzana, en un trabajo elaborado con datos del IMSS.
Respecto a estas cifras alarmantes, a nivel nacional esta entidad federativa sólo fue superada por la Ciudad de México, que perdió 109,639 plazas, indica el reporte, en el que además se señala que estos dos, junto a siete estados más, presentan cifras lamentablemente negativas.
Hasta ahora 23 entidades se han recuperado después de la pandemia y muestran números positivos, encabezando la lista el estado de Baja California, donde se crearon 101,808 empleos formales, seguido por Nuevo León, con 97,796 y Jalisco con 58,789 fuentes laborales.
Y la pregunta del millón de dudas, sería saber por cuáles razones, en estos 23 estados no hubo este déficit o pérdida. ¿Tendrán algo que ver los gobernantes, o las poblaciones, las ganas de trabajar, o cuál será la causa principal?
Alberto Aja Cantero, el presidente de la COPARMEX (Confederación Patronal de la República Mexicana), indicó que, de acuerdo con los datos, se comprueba que el estado de Veracruz no ha podido recuperarse de los estragos de la pandemia de Covid-19, proponiendo esa confederación, a manera de alternativa de solución, una mayor unión del empresariado para salir de tal caída económica.
Pero, para desgracia mayor de los que más sufren desempleo, las autoridades estatales no parecen comprender la afectación a la sociedad, lastimada en sus decrecientes niveles de bienestar. La gente del gobernador únicamente propone como opción las innumerables ferias que hacen apresuradamente con cualquier pretexto (ferias del pambazo, de las garnachas, el Tecolutla Fest, y varias más, junto a los tequios de la foto del Feis del jefe y su equipo), adonde envían a los mandos medios y personal eventual a pueblear, a cortar pasto, a sembrar, a pintar y a todo tipo de inútiles ocurrencias de los funcionarios principales del cuitlahuismo.
El secretario de desarrollo económico Enrique Nachón ha pasado el tiempo deambulando por los caminos jarochos en la búsqueda de señales y una brújula que le oriente, mientras que el secretario de finanzas Lima Franco, va por ahí promoviendo negocios deportivos y jugando las pelotas para distraer a la gente y, según afirman algunos enterados, para beneficiar a los queridos cuates. Su labor más satisfactoria, parece ser la relacionada con los recurrentes préstamos bancarios que gestiona con diligencia para mantener el pesado barco burocrático que con su peculiar alegría tripula Cuitláhuac García.
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Ya veremos de qué llenan los escribidores de la oficina del programa de gobierno las 300 páginas del cuarto informe que se presentará este 15 de noviembre, después de enmascararse y maquillarse en la Fiesta de los Muertos de este año, y cuyo evento magno lo anuncian para la ciudad de Pánuco, lejos de la capital del estado y de los críticos que saben bien que los de palacio no tienen nada que informar, salvo pérdidas, errores y corrupciones maquilladas.
