El compositor e intérprete mexicano Agustín Lara todavía convoca a admiradores de distintos estados del país, quienes, pese a que ya pasaron 48 años de su muerte, acuden a su Casa Museo en el Bulevar Adolfo Ruiz Cortines en el fraccionamiento Costa Verde de esta localidad.
De martes a domingo, la también llamada “Casita Blanca” abre sus puertas a visitantes y recibe a turistas que acuden al puerto a admirar en la entrada principal la estatua de cuerpo completo del compositor, quien nació en Tlacotalpan, Veracruz, el 30 de octubre de 1897.
Los visitantes recorren el domicilio, que consta de dos pisos con vista al mar, el cual fue construido por el contraalmirante Álvaro Sandoval.
En ese inmueble, Ángel Agustín María Carlos Fausto Mariano Alfonso del Sagrado Corazón de Jesús Lara y Aguirre del Pino vivió con su esposa, Rocío Durán, quien la vendió, y posteriormente fue recuperada por el gobierno del estado para convertirla en museo.
En el lugar se exhiben algunas pertenencias del compositor, como pantuflas, un reloj de bolsillo, dos pianos, un traje blanco, discos de acetato que, con fotografías de sus esposas, hermanos, padres, e infancia adornan las paredes.
En la temporada de vacaciones se incrementa la afluencia de visitantes a ese lugar, donde el autor de “María bonita” y “Arráncame la vida” recibía a sus amigos del puerto y a algunos intérpretes.
La casa tiene espacios como teatro de revista, un área en la que hay retratos en los que Lara aparece con artistas como Pedro Vargas, Juan Arvizu, Maruca Pérez y Ana María Fernández; sus exesposas, Esther Rivas Elorriaga, Angelina Bruscheta Carral, Clarita Martínez, Yolanda Santacruz Gasca, Rocío Durán y la actriz María Félix.
Las salas del museo guardan historias de las veladas que el compositor pasó con sus amigos, mientras las familias que lo recorren conversan sobre el número de musas que tuvo y la belleza de la letra de sus canciones que le ganaron el mote de “Músico Poeta”.
El museo cuenta con un espacio que recrea el teatro-estudio Verde y Oro de la estación radiofónica XEW, allí se encuentra un piano y los visitantes pueden ingresar a tomarse algunas fotografías.
La casa fue restaurada por el gobierno de Veracruz para convertirla en museo, y a un costado se localiza un pequeño restaurante bar que forma parte del terreno del inmueble, que antes de ser remodelado estaba abandonado, comentaron vecinos del lugar.