José Antonio Jiménez Martínez, padre del menor que falleció en un accidente en el elevador de plaza Américas, negó que su hijo Cristo Fernando se dedicara a pedir dinero o vender
Aseguró que él se dedica a recolección y venta de botellas de plástico y cartón y que con ello lleva el sustento diario a su familia.
Dijo que el niño salió de casa y que por primera vez se alejó de su hogar en la colonia Campo de Tiro; señaló que iba acompañado de otros niños y decidió ir a jugar al elevador.
No obstante, admitió que Cristo no pudo inscribirlo en el segundo año de primaria por falta de recursos, per que se quedó al cuidado de la abuela.
“El niño siempre se salía a jugar en la calle de arriba. No vendía chicles, por eso trabaja yo, para llevarles dinero y comida a la casa. Un niño de la calle no tiene padres y anda solo en la calle, él tenía a su padre”.
Por su parte, el abogado Gabriel Salas Aguilar aseguró que existe una responsabilidad penal y civil de plaza Américas por el mal funcionamiento del elevador.
Dijo que en las investigaciones que realiza la Fiscalía General del Estado (FGE) se advierte que el elevador tuvo una falla mecánica y que por esta razón la plaza podría enfrentar incluso una denuncia por homicidio doloso y, llegado el caso, tendría que pagar una indemnización a la familia de hasta 5 mil salarios mínimos.
