Debido a que el coronavirus ya llegó a México, con 5 casos confirmados hasta el momento, las compras de pánico, en farmacias y tiendas de autoservicio, son para adquirir desinfectantes ambientales, de mano y cubrebocas, pese a la crisis económica que hay en el país.

Sí utilizó dinero del “guardadito” -destinado para la rifa del avión presidencial- y prevenirse de algún contagio, hizo bien. Hoy era el día en que comenzarían a circular y vender los “cachitos” de lotería del avión presidencial, que con tanta enjundia -y como niño gritón de la Lotería Nacional- promueve el presidente López Obrador y nada de nada.

Pero si de gritos y pánico se trata, hoy en Macuspana, Tabaco, la tierra que vio nacer a AMLO, sus paisanos no lo recibieron con mucho amor que digamos.

Anuncios

En tono molesto, López Obrador soportó abucheos y gritos contra el gobernador Adán López y el alcalde Roberto Villalpando, por promesas incumplidas, al grado de que amagó con suspender su discurso y atribuyó la protesta a la “politiquería”.

La gente esta harta del cansino discurso mañanero y de la palabrería obradorista, y ello se reflejó en los gritos de sus amigos tabasqueños. Pero como dice el sabio refranero: “Para que la cuña apriete, debe ser del mismo palo” y todo por la falta de seriedad que el ejecutivo federal le ha dado a la investidura presidencial.

¿Qué le preocupara a AMLO, el coronavirius, la venta de billetes de lotería del avión presidencial, el movimiento feminista #UnDíaSinNosotras o el desmoronavirus de la incipiente y errática 4T?.

Publicidad