Mientras que una buena mayoría está atenta y ocupada con la pandemia mundial del coronavirus, los grupos morenistas en Veracruz hacen circo, maroma y teatro para avanzar en sus estrategias de operación y en la conquista de las posiciones más importantes de la entidad.
El diputado guinda Amado Cruz Malpica lanzó el sábado pasado una curva suave en la que propuso una iniciativa de decreto para modificar la Constitución del estado a fin de considerar veracruzanos a los nacidos en otras entidades.
Eso ha servido como una buena cortina de humo para promover y especular que ya viene como gobernador Ricardo Ahued o hasta Rocío Nahle, y de ese modo distraer para que nadie cuestione a los diputados locales el argumento legal aplicado para autorizar al gobierno de Veracruz la entrega con retraso del Segundo Informe Trimestral del Gasto Publico.
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Con la misma intención, los confinados legisladores lanzaron la convocatoria para elegir al Titular de la Fiscalía General del estado y al Fiscal Anticorrupción, simple señuelo para evitar cuestionamientos legales y políticos. Se sabe que los seleccionados cuitlahuistas ya cumplen tareas relacionadas con esas posiciones.
Para qué retrasar ese informe. ¿Será que por fin llegan las obras públicas prometidas de Cuitláhuac? O es que ese informe será el de los apoyos por el coronavirus, y quieren correr en paralelo con los tiempos, ¿las cuentas y los cuentos del gobierno federal?
