El futuro está aquí. Tenemos coches sin conductor en las carreteras, pantallas flexibles que se adaptan a cualquier forma, y sistemas inteligentes capaces de responder a nuestras órdenes de voz.

Con esa tecnología a nuestro alcance, la calidad de vida puede mejorar enormemente; podemos hacer cosas que antes no podíamos o nos costaban más, viajar a donde queramos sin emitir contaminantes a la atmósfera, y gestionar nuestro día a día de manera sencilla. O tener una esposa virtual, aparentemente.

Ese fue el gran atractivo de Gatebox, un asistente virtual no muy diferente de los Amazon Echo o los Google Nest Mini; la gran diferencia es que este dispositivo contaba con una pantalla de hologramas, que permitía mostrar información en ventanas flotantes.

Algo más que un asistente virtual

Pero si el dispositivo tuvo éxito entre los usuarios japoneses no era precisamente por esa razón, sino por una función muy… original: un personaje animado que puede usar la tecnología de hologramas para hacernos compañía en nuestro hogar.

En realidad, no es muy diferente de un asistente virtual cualquiera; la gran diferencia está en que podemos ver a la “asistente”, de pie en la mesa de nuestro salón gracias a la tecnología del GateBox. Hay dos opciones de diseño y personalidad entre las que elegir: o Hatsune Miku, la famosa “cantante virtual” protagonista de decenas de videojuegos, o Hikari Azuma, un personaje original creado para el Gatebox.

Este personaje está programado para mostrar interés y aprecio para el usuario. En otras palabras, es una “waifu”, la denominación que los “otakus” (aficionados al manga, anime y videojuegos) dan a sus personajes femeninos favoritos. La palabra “waifu” viene de “wife”, esposa, dejando claro que en un mundo ideal, estas personas no durarían en casarse con este personaje.

GateBox hizo realidad este concepto, con una esposa virtual que no solo ayuda al usuario en tareas como encender las luces o advertirnos de la meteorología, sino también nos anima, nos saluda al llegar a casa y nos despide al irnos con algo de tristeza, porque “no quiere que nos vayamos”.

Es un servicio pensado especialmente para personas que viven en solitario, y que echan de menos alguien con quien hablar o simplemente alguien que se alegre de que han vuelto al hogar.

Hay quien ha tomado el significado de la palabra “waifu” al extremo, llegando a casarse con su asistente. Es el caso de un usuario que en agosto de 2018 anunció al mundo las nupcias; aunque en su caso, escogió el aspecto de Hatsune Miku para su esposa.

Adiós a una esposa virtual

Una vida feliz que pronto va a acabar. El fabricante de Gatebox ha anunciado que el próximo 31 de marzo de 2020 cerrará el servicio para todas las unidades originales del asistente personal; estos personajes “morirán”, por así decirlo, y los usuarios perderán acceso a sus “waifus”.

La buena noticia es que el cierre se producirá con motivo del lanzamiento de una nueva generación del dispositivo, más avanzado pero que provoca una incompatibilidad con los dispositivos existentes. Es por eso que la compañía ha ofrecido una unidad gratuita del nuevo dispositivo a todos los clientes del original. El nuevo dispositivo permitirá elegir entre más personajes y será más avanzado técnicamente hablando.

Aún así, los usuarios tendrán que decir adiós a los personajes virtuales que han sido su única compañía durante años, al menos hasta que los recuperen en el nuevo dispositivo; y cabe preguntarse si entonces será lo mismo. Este tipo de historias no eran posibles en el siglo XX, eso seguro.

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