Una vecina de Tokio de 30 años ha presentado una demanda contra un hombre que, habiendo acordado con ella actuar como donante de esperma, la dejó embarazada, luego de que se descubriera que el sujeto la engañó sobre su origen étnico, estudios y estado civil, informan medios locales.

Al momento de los hechos, que tuvieron lugar hace poco más de dos años, la demandante y su esposo ya tenían un hijo en común de 10 años y planeaban tener otro bebé. Sin embargo, al cónyuge le diagnosticaron un problema de salud hereditario.

Ante esta situación la pareja decidió recurrir a los servicios de un donante de esperma, pero en vez de acudir a una institución autorizada optaron por buscar a un candidato en las redes sociales.

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De esta manera en marzo del 2019 conocieron a un joven de 20 y tantos años que aseguró ser un ciudadano japonés, graduado de la Universidad de Kioto, una de las más importantes del país, y soltero. El sujeto mantuvo relaciones sexuales con la mujer en unas diez oportunidades y finalmente, dos meses más tarde, la dejó embarazada.

Ya durante el periodo de gestación la mujer descubrió que el donante de esperma en realidad era un hombre casado de origen chino y que jamás estudió en la mencionada institución.

Tras dar a luz, el matrimonio entregó al recién nacido a un centro de cuidado infantil en la capital japonesa. Además, la madre denunció al padre biológico del bebé por utilizar información falsa para engañarla y tener sexo con ella, y exigió 130 millones de yenes (2,8 millones de dólares) en daño moral.

La ley japonesa establece que toda persona nacida con ayuda de un donante de esperma tiene derecho a conocer la identidad de sus padres biológicos, motivo por el cual los bancos de esperma sufren de escasez de voluntarios.

Al mismo tiempo, muchas parejas acuden a las redes sociales en busca de candidatos. Se estima que en el país asiático viven aproximadamente 10,000 personas nacidas como resultado de este tipo de encuentros.

Los especialistas advierten que se trata de una práctica peligrosa, ya que un donante de esperma no verificado podría transmitir enfermedades.

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