El papa Francisco invitó, en la homilía de las Vísperas recitadas en la basílica de San Pablo Extra Muros al término de la semana de plegaria por la unidad de los cristianos, a amar a los demás, a todos, y no solo a quien piensa como nosotros.
Francisco, como se había anunciado, estuvo ausente debido a una ciática; leyó su homilía el cardenal Kurt Koch, Presidente del Pontificio Consejo para la Promoción de la Unidad de los Cristianos.
El Espíritu Santo “nos lleva a amar -dijo el papa- no solo a quien nos quiere bien y piensa como nosotros, sino a todos, como Jesús nos enseñó. Nos hace capaces de perdonar a los enemigos y las ofensas sufridas. Nos impulsa a ser activos y creativos en el amor”.
Nos recuerda que el prójimo no es solo quien comparte nuestros valores e ideas, sino que nosotros estamos llamados a hacernos prójimo de todos, buenos samaritanos de una humanidad vulnerable, pobre y sufriente, hoy tan sufriente que yace por las calles del mundo y que Dios desea recoger con compasión”.
