La canciller de Ecuador, Gabriela Sommerfeld, dijo este miércoles que pedir disculpas a México “no está sobre la mesa”, luego de que la Organización de los Estados Americanos (OEA) aprobará esta mañana una resolución condenatoria por la irrupción de policías ecuatorianos a la embajada mexicana en Quito el pasado viernes.
“Ecuador siempre está abierto a fortalecer relaciones con todas las partes. Eso no está en la mesa de discusiones en estos momentos (pedir disculpas)”, dijo Sommerfeld a los medios de comunicación.
Sin embargo, la canciller dijo que a pesar de que no se prevé una disculpa por parte de Ecuador a México, la resolución de la OEA fue “justa”
“Fue una resolución justa, donde se ve el incumplimiento y el uso de las sedes diplomáticas, vamos adelante con Ecuador”, dijo.
Agregó que no pudo estar presente en la resolución de la OEA que se llevó a cabo este miércoles, porque se encontraba en una sesión extraordinaria de Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), convocada por la presidenta de Honduras, Xiomara Castro, para abordar las primeras medidas sobre este caso.
“Esta duró cinco horas en debate con 33 países latinoamericanos, de esa reunión no ha habido una resolución. Vamos a hacer respetar nuestra versión de los hechos, son foros internacionales que están hechos para que, de una forma equilibrada a través del diálogo, y de forma respetuosa, se escuche a todas las partes y se llegue a soluciones”, agregó.
En la sesión de la OEA, la resolución presentada por la delegación de Colombia, fue aprobada con el voto a favor de la mayoría de los países, excepto el de Ecuador, que votó en contra.
La delegación de México no estuvo presente en la sesión, mientras que El Salvador se abstuvo de emitir su voto.
“Condenar enérgicamente la intrusión en las instalaciones de la embajada de México en el Ecuador y los actos de violencia ejercidos en contra de la integridad y la dignidad del personal diplomático de la misión”, dice el documento.
Además, en la resolución se reafirma la obligación de los países para respetar el Convenio de Viena respecto a las relaciones diplomáticas, que establece que las embajadas son inviolables.
