En medio del júbilo por la “misión cumplida” del jefe de la bancada de Morena en la Cámara de Diputados, Mario Delgado, porque asegura que la agenda legislativa que les pidió el presidente Andrés Manuel López Obrador “está prácticamente cumplida”, la histórica mayoría parlamentaria de izquierda “se despide” anticipadamente y “baja la cortina” con una productividad legislativa de apenas un 9.3 por ciento.

El grupo mayoritario impuso la agenda del Presidente y de un total de 4 mil 650 propuestas de reformas legales o de nuevas leyes recibidas de todos los partidos hasta el pasado 31 de julio, sólo se aprobaron 434, otras 295 fueron desechadas, 541 fueron retiradas y 3 mil 380 permanecen en calidad de “pendientes”.

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En cambio, al Presidente le aseguraron la aprobación del 83.4 por ciento de sus propuestas. De 18 iniciativas del Ejecutivo federal le aprobaron 15 y tres siguen pendientes: su proyecto de reformas a los artículos 108 y 111 de la Constitución en materia de desafuero del Presidente; sus reformas a la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria, y su iniciativa de reformar la Ley de Educación Militar del Ejército y Fuerza Aérea,.

Apenas a dos años de gestión y aunque aún les falta un año, la imposición de la agenda de Palacio Nacional frenó también la agenda de los propios morenistas, y procedió sólo el 8.5 de sus iniciativas.

La oposición, en general, ha sido notoriamente castigada. Al PAN, de sus 715 propuestas, le avalaron 57; al PRI, de 422 le permitieron aprobar 46; a MC, de 550, apenas le han aprobado 37, y al PRD, de 309 le aceptaron sólo 12.

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