El Órgano de Fiscalización Superior del Estado detectó un presunto daño patrimonial de 4 mil 500 millones de pesos en las cuentas públicas de entes estatales en 2018, es decir, durante el último año del Gobierno de Miguel Ángel Yunes Linares.
Además, en el primer año de las actuales administraciones municipales se encontró un presunto daño patrimonial por 330 millones de pesos.
Así lo informó el auditor general saliente del Órgano de Fiscalización Superior del Estado, Lorenzo Antonio Portilla Vázquez, al presentar el resultado de la fiscalización de las cuentas públicas de dicho ejercicio.
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