Bernardo Naranjo Piñera, Consejero de la Junta de Gobierno del Instituto Nacional para la Evaluación Educativa, sostuvo que se requiere de un órgano autónomo para evaluar todos los componentes sobre el tema y a partir de ello generar y difundir información pertinente, objetiva y confiable para la sociedad y autoridades educativas.
Por ello, en entrevista con José Cárdenas, consideró equivocada la decisión de desaparecer a la institución pues se toma el control del termómetro para medir la calidad educativa y eso resta equilibrio a las futuras decisiones educativas.
De concretarse la desaparición del organismo, Naranjo Piñera señaló que sería el Ejecutivo quien decida lo que sucederá con toda la estructura, sin embargo, en tanto no se conozca la iniciativa oficial y no se den las modificaciones planteadas, la Junta de Gobierno continuará cumpliendo con su mandato y se mantendrán en defensa de la institución, cuya labor se ha construido a lo largo de 16 años.