La asociación civil +Vida +Familia está convocando a las organizaciones hermanas pro vida y pro familia, a las asociaciones civiles, empresarios, comerciantes, jovenes, iglesias evangélicas y cristianas y todas las familias que así lo compartan, a tomar las instalaciones del palacio legislativo del Estado de Veracruz en la última sesión de este periodo ordinario de sesiones en que pretenden votar la “aberrante modificación” al Código Civil que permitiría el matrimonio igualitario.

En un comunicado el presidente de la agrupación Arturo Segovia señala que es la casa del pueblo y que se mantiene con los impuestos el salario de estos diputados, para que den resultados, no para que hagan leyes que agravien a quienes los mantienen. 

“Estamos preparados y encaminados a esta sesión legislativa para defender el matrimonio y a nuestras familias”, señala.

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Insistió en que actualmente el matrimonio entre hombre y mujer regula y protege a la familia, mujeres y niños y esta protección cada día es menor debido al debilitamiento que sufren las familias con leyes adversas. 

“Si se modifica esta figura para permitir las uniones homosexuales, sólo se regulará la relación de pareja y no se protegerá a los más vulnerables de la familia. El matrimonio no puede ser usado como un instrumento igualador. Esa es una aberración”, señaló.

Sostiene que modificar el Código Civil con esos yerros, donde sustituyen al matrimonio entre un hombre y una mujer, abriría la puerta a la adopción de niños por personas del mismo sexo, al derecho a las técnicas de reproducción que implican una serie de dilemas éticos, a la compra-venta de seres humanos, a la renta de vientres o maternidad subrogada y a la homosexualización de los niños.

“Es gente perversa que hacen tributo al mal y que odian a la familia, por eso la quieren aniquilar. Pero además ¿cuándo el mal ha tenido derechos?”, cuestiona.

Añade que la familia constituye, más que una unidad jurídica, social y económica, una comunidad de amor y de solidaridad, insustituible para la enseñanza y transmisión de los valores culturales, éticos, sociales y espirituales, esenciales para el desarrollo de sus propios miembros y de nuestra sociedad.

“El Estado y la sociedad deben protegerla con medidas de carácter político, económico, social y jurídico, que contribuyan a consolidar su unidad y estabilidad para que pueda cumplir su función específica, no atentar contra ella, como lo están haciendo estos diputados, y lo que nosotros, bajo ninguna circunstancia vamos a permitir”.

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