En sus últimas audiencias, el ex secretario de Finanzas y Planeación, Mauricio Audirac Murillo ha dado a conocer acusaciones a través de sus abogados, sobre la participación de otros ex funcionarios en el desvío de recursos, a quienes señala abiertamente de ser los responsables del saqueo.
Conforme a los datos aportados por Audirac, la licuadora de recursos en el sexenio anterior se puso en funcionamiento, al menos desde el año 2012, lo cual fue del conocimiento del gobernador Javier Duarte de Ochoa y operada por los ex titulares de la Secretaría de Finanzas y Planeación y consentida por otros ex funcionarios.
De acuerdo a la versión de sus abogados, Mauricio Audirac nunca estuvo de acuerdo y no quiso participar en esa operación administración, por lo cual han solicitado a la Fiscalía General del Estado presente documentos que establezcan que él ordenó algún pago indebido, transferencia o manejo de la cuenca concentradora.
En este sentido los abogados han señalado ex funcionarios como Tomás Ruiz González, Salvador Manzur Díaz, Fernando Charlestón Hernández, Carlos Aguirre Morales y el propio Alberto Silva Ramos sabrían y habrían avalado la licuadora de recursos, con lo cual, dinero etiquetado para determinadas obras o acciones no se aplicaron en las metas autorizadas.
En un nuevo intento por demostrar la inocencia de su cliente, los abogados relataron que el funcionamiento de la licuadora, consistía en enviar oficios firmados por el entonces subsecretario de Egresos, Carlos Aguirre Morales a funcionarios de diversas áreas, para pedirles que transfirieran los recursos a una cuenta concentradora, con la promesa de devolvérselos.
Pero de acuerdo a la versión de Mauricio Audirac, nunca estuvo de acuerdo, ni avaló estas irregularidades, por el contrario envió oficios para cesar la situación.
