Jesús Murillo Karam, ex procurador general de la República, fue trasladado al Reclusorio Norte, donde deberá permanecer después de haber sido acusado de haber participado en la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa.
El exfuncionario había estado en la Torre Médica del Centro de Reinserción Social Tepepan para cumplir con la medida cautelar de prisión preventiva.
José Javier López García, abogado del ex procurador, señaló en un comunicado que “el día de hoy, el licenciado JESÚS MURILLO KARAM fue traslado de la Torre Médica de Tepepan al Reclusorio Norte, por lo que la defensa señala lo siguiente: rechazamos la medida pues pone en riesgo la salud y vida del licenciado”.
Además, la defensa de Murillo Karam sostuvo que el exfuncionario apenas la semana pasada fue diagnosticado con COVID-19, lo que se sumaría a las otras enfermedades que padece, como son enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), hipertensión arterial sistémica e insuficiencia vascular cerebral.
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¿Qué enfermedad tiene Jesús Murillo Karam?
Jesús Murillo Karam fue detenido el pasado 19 de agosto, un día después de que Alejandro Encinas, subsecretario de Derechos Humanos de Gobernación, informara sobre el caso de los 43 estudiantes de Ayotzinapa. Al día siguiente, se le dictó prisión preventiva justificada, por riesgo de fuga, en una audiencia en el Reclusorio Norte.
En tanto, el 24 de agosto, un juez de control vinculó a proceso a Murillo Karam por delitos contra la admninistración de justicia, tortura y desaparición forzada en el caso Ayotzinapa. Es señalado también por participar en la fabricación de la “Verdad Histórica”.
El exfuncionario fue llevado al Hospital General Balbuena para realizarle una tomografía de tórax para dar seguimiento a su estado se salud, pues tiene diagnóstico de EPOC.
El 20 de octubre salió de prisión y fue trasladado al hospital Xoco por problemas de presión alta, altos niveles de colesterol y triglicéridos. Y el 22 de octubre fue trasladado al Hospital de Cardiología en la CDMX, e ingresado a terapia intensiva.
