El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, ha jurado el cargo este sábado por cinco años más. El político asumió su segundo mandato, luego de haber arrasado en las últimas elecciones marcadas por la controversia, pues la Constitución del país centroamericano prohíbe la reelección inmediata.
La investidura de Bukele se celebró en el Palacio Nacional, en el centro histórico de San Salvador, a cuya plaza fueron convocados sus simpatizantes. Además, a la ceremonia asistieron invitados especiales, entre los que figuran el rey de España, Felipe VI; el presidente de Argentina, Javier Milei; el presidente de Costa Rica, Rodrigo Chaves; el presidente de Ecuador, Daniel Noboa; el secretario de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Alejandro Mayorkas; y un hijo del exmandatario estadounidense Donald Trump.
“Por fin somos un país verdaderamente libre”
En su discurso, Bukele destacó que esta jornada “han venido el mayor número de delegaciones que ha tenido el país en su historia”. “Este Gobierno, que inicia este día, ha sido reconocido por el 100 % de los países del mundo. Todos los Gobiernos del mundo reconocen este Gobierno a pesar de lo que digan algunos opositores”, agregó.
“Este es el momento más importante de nuestra historia reciente. Por fin vencimos el miedo y somos un país verdaderamente libre”, sostuvo Bukele ante los aplausos de la multitud. “La libertad es una de las cosas que más anhelamos los seres humanos y nuestro país después de mucho tiempo al fin tiene libertad”, señaló.
“Logramos lo inimaginable y lo hemos hecho acá, pero no con nuestra fuerza ni con nuestra inteligencia, sino únicamente con la gloria de Dios y con la sabiduría de Dios. Los milagros que hemos visto en este país no son pocos y si Dios así lo desea, vendrán muchos más”, afirmó el presidente.
Durante su intervención, Bukele dedicó unas palabras de agradecimiento a su familia, a todas las personas que lo apoyaron en su camino político, así como “al gran pueblo salvadoreño” que no solo ha puesto de manifiesto su confianza “en tres elecciones distintas, sino desde mucho antes cuando todo parecía un sueño”.
“Hay que proteger nuestro legado”
“El 4 de febrero ustedes reafirmaron que este es el camino que ustedes quieren para El Salvador, para que salga adelante y cambiar para siempre. Pero a partir de ahora, 1 de junio, tenemos una enorme tarea, la de proteger como un león nuestro legado. El legado más grande que un pueblo y un Gobierno trabajando de la mano le dejarán a la futura generación de salvadoreños”, continuó.