La semana pasada José Francisco Yunes Zorrilla se convirtió en el candidato del PRI a la próxima gubernatura del estado. Y por diversas circunstancias y razones se podría afirmar que este resulta ser el mejor Pepe Yunes entre todas las versiones que los veracruzanos han conocido del político nacido en Perote hace 54 años.

Y por qué se le concede esa calificación a una persona que cuenta con las virtudes y defectos inherentes al ser humano. Sucede así si se toma en cuenta que estamos hablando de una candidatura a un alto cargo público, candidatura en la que por primera vez se congregan condiciones muy peculiares e inéditas en esta entidad.

La primera de ellas es que el gobernador actual concentra fuertes críticas con relación a su gestión que concluye en 2024, catalogada como pésima. La segunda es que en esta ocasión López Obrador no podrá andar en campaña como candidato, aunque eventualmente decidiera acompañar a su discípula y correligionaria Rocío Nahle.

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La tercera es que el año próximo el candidato priista acudirá a la campaña con respaldo adicional de los partidos PAN y PRD, coaligados con el tricolor para la elección del domingo 2 de junio.

Pero también tenemos que considerar que Pepe Yunes participará en la contienda con mayor experiencia, con la opinión positiva de grandes sectores de la población, y que en ningún momento de su trayectoria ha sido señalado por actos de corrupción. Caso contrario al de Nahle, a quien le han endilgado cuestionamientos y acusaciones por la obra de la refinería de Dos Bocas, cuyos señalamientos se pueden encontrar en redes sociales y en publicaciones periodísticas a nivel nacional.

Respecto a la formación profesional del político peroteño, debe recordarse que él contendió en 2018 por la gubernatura que perdió ante el ahora gobernador Cuitláhuac García, que hizo campaña de la mano de AMLO.

Antes de ello, Yunes Zorrilla había sido senador de la república, presidente del PRI en el estado, diputado federal, diputado local y presidente municipal, justamente cuando inició su carrera política en los albores del siglo XXI. Cuenta con estudios profesionales y posgrados en importantes universidades del país y el extranjero. Su mayor experiencia y conocimiento tiene que ver con la economía, el desarrollo económico y el gasto público. 

En su labor política se le reconoce por haber recorrido varias veces por los pueblos y caminos de Veracruz. Incluso fue uno de los candidatos con mayor votación nacional en la elección donde ganó la diputación federal en el distrito de Coatepec.

Sus seguidores le admiran el don de gentes, las numerosas obras que ha gestionado como legislador y sobre todo los frecuentes pronunciamientos y señalamientos sobre la actividad pública de gobernantes y políticos nacionales.

El Frente opositor que conforman estos tres partidos y muchos grupos ciudadanos que han manifestado su disgusto por la grave situación de la entidad, están de acuerdo en que para lograr un verdadero cambio hacia el progreso y para la siguiente gubernatura de Veracruz, es mejor Pepe que cualquier otro. 

Pero para hacerlo realidad, Pepe debe cuidarse de Pepe, de los zalameros, oportunistas y carteristas que le rodean y restan a su proyecto, de lo contrario no podrá dar el giro de 180 grados en el discurso, propuesta e imagen que anhelan millones de veracruzanos y que podrían darle el triunfo.

Vendrán los registros formales en el INE. Sus contendientes deberían soltar la soberbia y estar preocupados. 

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