(SPI).- Al tomar protesta como alcalde de Veracruz, Fernando Yunes Márquez, dio a conocer que heredó cuentas por pagar a corto plazo por 240 millones de pesos de la administración que encabezó Ramón Poo Gil.
En ese sentido, el hijo del gobernador Miguel Ángel Yunes Linares, advirtió que su gobierno enfrenta una situación financiera de emergencia.
Anunció que se tendrá un ahorro en la cuenta del Cabildo porteño mediante la reducción de los salarios, cuya nómina representa la segunda más alta del estado.
Durante el mensaje que dirigió a los asistentes a su toma de protesta, agradeció a los ediles su disposición para aceptarse “amarrar el cinturón”.
“Las necesidades en infraestructura, apoyos sociales y mejora de los servicios públicos requieren de un gobierno con finanzas sanas y un manejo responsable de los recursos públicos y porque quiero a Veracruz en marcha vamos a apostarle a la modernización y transparencia en el control del gasto, aprovecharemos cada peso”, expresó.
Por otra parte, dijo que se analizará si los exdirectores del Sistema de Agua y Saneamiento (SAS) incurrieron en una responsabilidad al llevar a la quiebra a dicho organismo operador y en el caso de que lo fueran presentará las denuncias correspondientes.
Durante su intervención, criticó el servicio de agua y saneamiento que el Grupo MAS brinda actualmente a las familias veracruzanas.
Señaló que existen 15 mil baches y mil 600 hundimientos en la ciudad, los cuales no atiende el Grupo MAS.
“Soy muy claro, trabajaré para que quien dé el servicio de agua potable en nuestra ciudad cumpla a cabalidad con los compromisos establecidos en el título de concesión, principalmente los referidos a obra pública en la materia y tomaré, de ser necesario, las medidas pertinentes para que lo hagan; de igual forma, analizaré a detalle la probable responsabilidad de los exdirectores del SAS en la quiebra”, agregó.
Finalmente, se comprometió para concretar un cambio de fondo en la ciudad durante su mandato, el cual concluirá el 31 de diciembre del año 2021.
