Una vez más, el Poder Judicial impidió el acceso a los medios de comunicación a la audiencia relacionada con el caso de personas desaparecidas, pues sin justificación alguna, personal del juzgado decidió no autorizar el paso a reporteros.
A pesar de que el Código Nacional de Procedimientos Penales establece el caso en que las audiencias pueden ser privadas, la juez Mónica Segovia Jácome tomó la decisión de sólo excluir a los medios de comunicación y dejar pasar sólo a los familiares de Gilberto Martínez y Carlota Zamudio, ex funcionarios de la Fiscalía General del Estado.
En dicha audiencia, se presume, pudieran darse datos que impliquen al ex fiscal general del Estado, Luis Ángel Bravo Contreras.
La decisión de la juez fue tomada ajena a la audiencia, pues cualquier resolución o acuerdo que emita debe estar fundado y motivado, lo cual no fue este caso, pues desde el inició se decidió cerrar el paso a los comunicadores.
Esta es la tercera ocasión que ocurre un impedimento para los reporteros cumplan con su labor de dar seguimiento a las audiencias en los juzgados de Pacho Viejo.
La primera ocasión, fue cuando el juez Marco Antonio Lobato no permitió que reporteros ingresaran a la sala de juicios orales para una audiencia relacionada con Gabriel Deantes Ramos.
Y ahora la juez Mónica Segovia Jácome, apenas el pasado martes sacó a los reporteros que cubrían la audiencia de casos de personas desparecidas a petición de los imputados, y ahora ni siquiera les permitió el acceso.
