El líder parlamentario del Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA) en la Cámara de Diputados, Mario Delgado, afirmó que no habrá “maniobras” de parte de su bancada, para “obtener un cargo”, en referencia a la renovación de la Mesa Directiva del recinto.
En medio de la disputa entre las fracciones parlamentarias del Partido del Trabajo (PT) y el Partido Revolucionario Institucional (PRI) por ese órgano de gobierno, el coordinador morenista y presidente de la Junta de Coordinación Política, fue insistente en que se respetará la ley, sin poner por delante del “proyecto de nación”, ambiciones e intereses personales.
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En redes sociales, Delgado Carrillo afirmó que su grupo parlamentario seguirá guiándose por principios, no por ambiciones, y tiene claro que para tener autoridad política, se requiere autoridad moral.
“En #Morena estamos convencidos de que para tener autoridad política hay que tener autoridad moral. En la elección de la mesa directiva de @Mx_Diputados vamos a respetar puntualmente la ley. No vamos a “maniobrar” para obtener un cargo. Nos guían los principios, no las ambiciones”, escribió en su cuenta en Twitter.
Subrayó que la prioridad es la unidad con los grupos parlamentarios aliados en San Lázaro, a fin de seguir aprobando las leyes que se requieran, en apoyo al presidente Andrés Manuel López Obrador.
“Ningún interés personal puede estar por encima del proyecto de nación. Nuestra prioridad es la unidad en la mayoría construida con los grupos parlamentarios afines, para seguir aprobando las reformas de la #4taTransformación y apoyar a nuestro presidente @lopezobrador_”, agregó.
En horas previas, el también aspirante a la dirigencia de su partido, quien fue insistente en que se respetará la ley en la renovación del principal órgano de gobierno en la Cámara de Diputados, habría expresado que ve “muy bien” que el PT asuma la Mesa Directiva, incluso, que el presidente sea su vicecoordinador, Gerardo Fernández.
En tanto, el diputado Fernández Noroña, informó que la tarde de este sábado fijará postura sobre la adhesión a su bancada del diputado Mauricio Toledo.
Este viernes, la bancada petista formalizó la integración de cuatro nuevos miembros, con lo que pasó de 43 a 47, superando por uno a la bancada del PRI, lo que técnicamente lo convirtió en tercera fuerza en el recinto y le abrió la puerta para acceder a la presidencia de la Cámara.
El hecho provocó la intervención de las dirigencias del Partido Acción Nacional (PAN), que se pronunció a favor del PRI; del propio tricolor; y hasta de MORENA, que repudió la integración del diputado Mauricio Toledo.
La adhesión de Toledo Gutiérrez provocó una andanada de críticas y reclamos en redes sociales, a las que se sumaron senadores de MORENA, el propio dirigente interino de ese partido, Alfonso Ramírez Cuéllar; así como de legisladores de Movimiento Ciudadano (MC); y dirigentes y militantes del Partido de la Revolución Democrática (PRD).
Quienes se pronunciaron al respecto, coincidieron en identificar al legislador exmilitante del PRD y exdelegado en la anterior demarcación de Coyoacán, en la Ciudad de México, lo identificaron como corrupto, líder de grupos de choque y como artífice de agresiones violentas en la campaña de 2018, contra la actual Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum.
Los movimientos en la bancada del PT generaron un efecto más en San Lázaro: la bancada de MORENA perdió la mayoría absoluta de 251 diputados, al quedarse con 250 integrantes.
La mayoría absoluta le confería a la fracción morenista y su líder, Mario Delgado, la titularidad durante los tres años de la Legislatura, de la Junta de Coordinación Política.
Con un diputado menos, la bancada de MORENA podría perder la presidencia de ese órgano de gobierno en la Cámara, que podría ser reclamado por la segunda fuerza política en el recinto, en este caso el PAN.
