Marco Antonio del Toro Carazo ha dejado de ser oficialmente el abogado de Javier Duarte de Ochoa, a cuatro meses que concluya la ampliación de investigación complementaria, por decisión propia.
Ha trascendido que el despacho Sánchez Retana, el mismo que lleva los casos de César Duarte y Tomás Yarrington será quién lleve ahora la defensa de Javier Duarte.
El penalista informó a través de un comunicado que desde este jueves ya no seguirá con la defensa jurídica por razones “completamente ajenas” al cliente aunque al final del mismo, refiere que su despacho es para temas estrictamente jurídicos.
Del Toro, quien en más de una ocasión puso en evidencia a la Procuraduría General de la República (PGR), por errores en la carpeta de investigación de los delitos de delincuencia organizada y operaciones con recursos de procedencia ilícita, señaló que los motivos son parte del secreto profesional, por lo que no serán revelados.
El abogado afirmó que la defensa que integraron a favor del ex mandatario de Veracruz “es jurídicamente sólida, por lo que seguramente podrá ser retomada por el o los colegas que sean designados para su continuación de manera exitosa”.
Aseveró que las imputaciones “son de una fragilidad tal” que no deben resistir un debido proceso penal, más allá de lo que llamó linchamientos públicos irracionales que no tienen sustento alguno “en tanto se trata de meras percepciones que riñen con los medios de prueba que obran en los expedientes del caso”
Marco Antonio del Toro señaló que tras estos hechos, se procederá de manera ordenada al relevo con la nueva defensa e insistió en las presuntas “endebles imputaciones federales”.
También se refirió a las carpetas de investigación de la Fiscalía General del Estado (FGE) a cargo de Jorge Winckler Ortiz, de las que aseveró que están “muy lejos de ser veraces o fundadas”.