La obra del escritor José Emilio Pacheco conquista a todo el público porque desnuda el lenguaje de la retórica para construirlo en forma clara y directa, afirmó la poeta y promotora cultural Gabriela Cantú.

En entrevista, la escritora destacó que la obra del autor de Las batallas en el desierto “subyuga porque se aleja de todas las florituras y de todo lo barroco”. De su poesía, recordó No me preguntes cómo pasa el tiempo (1970), en el que en su opinión se nota su particular forma de construir un lenguaje.

“Parece más accesible y lo es, pero para llegar a esa forma de escritura tuvieron que pasar muchos años de trabajo, un cúmulo increíble de lecturas y muchas horas de dedicación a su obra”, añadió la también maestra en Ciencias con Especialidad en Lengua y Literatura por la Universidad Autónoma de Nuevo León.

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A su parecer el trabajo de José Emilio Pacheco, quien nació el 30 de junio de 1939, en algunos casos se puede emparentar con la poesía conversacional y con la narrativa.

“En sus poemas coquetea con otros géneros literarios para dar a cada uno sus propias reglas y, sin embargo, con el paso de los años construyó una obra sólida, en la que se observa una madurez que lo llevó a recibir numerosos premios”.

Tan solo en 2009 el escritor mexicano fue distinguido con los premios Cervantes y Reina Sofía de Poesía Iberoamericana, así como la Medalla de Oro de Bellas Artes. Dos años después obtuvo el Premio Alfonso Reyes, además de ser reconocido con diversos doctorados Honoris Causa, entre ellos uno de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

Cantú citó a dos escritores que hablaron sobre Pacheco, para destacar la trascendencia de sus creaciones: Carlos Monsiváis contaba que era un lector voraz que desde muy joven visitaba a los grandes maestros de su época, mientras que Jorge Fernández Granados analizó todas las transformaciones que ocurrieron en la obra.

“Su lenguaje transparente y sus poemas breves hacen guiños al aforismo. Si uno lee Alta Traición, quizá el más conocido de sus poemas, lo podemos comparar con Piedra de sol, de Octavio Paz, y a pesar de que estos dos son más extensos, José Emilio condensó en la obra su amor a la patria y al mismo tiempo el coraje que siente por esa patria que ha sido lastimada”, comentó la entrevistada.

Como narrador, la directora general adjunta de Difusión a la Historia del Instituto Nacional de Estudios Históricos de las Revoluciones de México (INEHRM) resaltó que su novela Las batallas en el desierto se lee en todo el país, pero “su obra es poesía toda ella, porque, al final, este género lo hace es conmovernos.

La percepción que Gabriela Cantú tiene del escritor que mañana cumpliría 80 años es que “en términos generales es un gran poeta y una de las grandes voces; lo amamos porque es un caso excepcional, pues le tenemos enorme cariño a la persona y a la obra”.

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