En las últimas semanas este portal de noticias ha ido revisando las posibilidades, fortalezas y debilidades de los distintos prospectos a la gubernatura de Veracruz para el siguiente sexenio que inicia el 1 de diciembre de 2024. Este lunes corresponde analizar la trayectoria y condiciones de Julen Rementería del Puerto en torno a dicho objetivo.
Se trata de uno de los más encumbrados hombres del panismo veracruzano, quien actualmente es senador de la república, coordinador de los senadores del PAN en esa cámara y, por ende, una de las figuras relevantes de la oposición en el país.
Ha sido alcalde de Veracruz, diputado local y secretario de infraestructura y obras públicas en el estado, durante el bienio (2016-2018) de Miguel Ángel Yunes Linares como gobernador de Veracruz, cargo que obtuvo gracias a negociaciones para apoyar su campaña en el año de 2016.
Entre los aspectos notables de su trayectoria reciente, es que el senador ha salido a hablar claro y contundente cuando se trata de resaltar lo que él considera error, omisión, corrupción o irresponsabilidad en la gestión pública federal, estatal e incluso de diversos alcaldes independientemente de su color político.
Entre los aspectos cuestionables o negativos del personaje, debe mencionarse su habilidad o debilidad para saltar localmente entre los grupos internos del PAN, habiendo recibido algunas veces hasta calificativos de ingratitud y traición, cuando ha tenido que cambiar de bando para alcanzar sus intereses personales. Uno de esos casos fue cuando negoció el respaldo para que su joven hijo Bingen Rementería pudiera ser propuesto a una diputación local que finalmente consiguió. Otro caso fue la serie de acusaciones de conflicto de interés y asignación directa de contratos de obra a un líder partidista que le dejó una clara mancha en su gestión como secretario de obras públicas.
Pero los casos más señalados fueron, primero, la pobre o inexistente supervisión que realizó cuando repavimentó con concreto hidráulico los 8 kilómetros de la autopista Xalapa-Coatepec, obra que la empresa realizó, dejando un tipo de pavimento resbaloso que ha ocasionado en los recientes 5 años, cientos de accidentes vehiculares, algunos fatales, y todos ellos, cuantiosos por sus daños materiales y humanos, y perjudicando gravemente la economía de los involucrados. El segundo caso fue la firma de un documento con el partido español VOX, de derecha, que ocasionó innumerables críticas, por ese evento lo realizó en el recinto senatorial.
Julen Rementería ya es uno de los perdedores con la sentencia definitiva respecto a la dirigencia del comité directivo estatal del PAN, confirmada ayer por el TEPJF, circunstancia favorable al grupo de Yunes Linares y totalmente desalentadora para el grupo del Chapito Guzmán, con el que últimamente ha trabajado Rementería.
La crudeza de las hemerotecas y la conversación de las redes sociales del estado, indican que Julen no tiene hasta ahora un nombre como para pensar seriamente en la gubernatura veracruzana, ya que sería un candidato sin peso ni discurso creíble. De lograr serlo, por obligado apoyo de Marko Cortés, y si consiguiera el triunfo en 2024, mucha gente de la zona de Xalapa podría verlo como algo positivo y conformista por la siguiente razón: entonces sí, se podría conseguir el retiro del pavimento resbaloso en la ruta a Coatepec y la colocación de un pavimento adecuado para el clima lluvioso de la región durante los seis meses más templados y fríos del año.
Con Julen eso es todo lo que hay.
